
El ashwagandha (Withania somnifera), también conocido como ginseng indio o cereza de invierno, es una planta medicinal que forma parte de la medicina tradicional india, conocida como ayurveda.
Esta planta ha ganado popularidad mundial debido a sus presuntos efectos beneficiosos sobre la salud, en particular en la gestión del estrés, la mejora de la función cognitiva, la regulación hormonal y el apoyo al sistema inmunológico.
Componentes activos
El ashwagandha contiene varios compuestos activos, entre los que se incluyen:
- Withanolides. Son los principales compuestos bioactivos, pertenecientes a la familia de los lactonas esteroides. Se cree que tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antitumorales.
- Alcaloides. Incluyen la withamina y otras moléculas que modulan el sistema nervioso y podrían tener propiedades sedantes.
- Saponinas. Compuestos que pueden mejorar la función inmunológica.
- Ácidos grasos. Que contribuyen a la acción antiinflamatoria de la planta.
Propiedades y beneficios potenciales

A lo largo de la investigación científica, el ashwagandha ha mostrado una variedad de efectos positivos sobre la salud. A continuación se presentan algunos de los más destacados:
Reducción del estrés y la ansiedad
El ashwagandha es conocido por sus propiedades adaptogénicas, lo que significa que ayuda al cuerpo a adaptarse a situaciones de estrés.
Diversos estudios han demostrado que la administración de ashwagandha puede reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Esto puede contribuir a disminuir los síntomas de ansiedad y mejorar el bienestar general.
Un estudio publicado en el Indian Journal of Psychological Medicine (2012) encontró que los participantes que tomaron extracto de ashwagandha experimentaron una reducción significativa de los niveles de ansiedad y el estrés comparado con el grupo placebo.
Mejora de la función cognitiva

Se ha sugerido que el ashwagandha mejora las capacidades cognitivas, incluida la memoria, el enfoque y la atención. Los estudios en animales y humanos han mostrado resultados prometedores en cuanto a sus efectos neuroprotectores.
Se cree que esto es debido a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, que ayudan a proteger el cerebro del daño oxidativo.
Un estudio de 2017 en Journal of Dietary Supplements mostró que los adultos sanos que tomaron ashwagandha experimentaron mejoras en la memoria y las funciones cognitivas.
Mejora de la salud hormonal

El ashwagandha se ha utilizado tradicionalmente para regular las hormonas, especialmente en hombres. Se ha demostrado que mejora los niveles de testosterona, lo que podría tener un impacto positivo en la fertilidad masculina, la libido y la masa muscular.
Un estudio realizado en 2013 encontró que los hombres que tomaron ashwagandha durante 8 semanas aumentaron significativamente sus niveles de testosterona y calidad espermática.
Además, el ashwagandha también puede ayudar a equilibrar las hormonas tiroideas, siendo útil para personas con hipotiroidismo subclínico.
Propiedades antiinflamatorias y antioxidantes

Los compuestos de ashwagandha tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, diabetes y ciertos tipos de cáncer.
Un estudio de 2015 en Journal of Ethnopharmacology destacó la capacidad del ashwagandha para reducir la inflamación y el estrés oxidativo en animales, lo que podría contribuir a sus efectos protectores en diversas condiciones patológicas.
Mejora del rendimiento físico
El ashwagandha se ha asociado con la mejora de la resistencia y el rendimiento físico. Algunos estudios han mostrado que puede aumentar la masa muscular y la fuerza, además de reducir la fatiga.
En un estudio de 2015, los hombres que tomaron extracto de ashwagandha durante 12 semanas aumentaron significativamente su fuerza en ejercicios de levantamiento de pesas.
Evidencia científica y estudios relevantes

A pesar de los beneficios prometedores mencionados, es importante tener en cuenta que, aunque hay estudios positivos, la investigación sobre el ashwagandha aún está en fase de expansión y no todos los efectos están completamente validados. A continuación, se destacan algunos estudios clave:
Un meta-análisis de 2019 en la revista PLOS ONE concluyó que el ashwagandha tiene efectos significativos sobre la reducción del estrés y la ansiedad, y que también puede mejorar la calidad de vida.
Sin embargo, algunos estudios han señalado la necesidad de más investigaciones a largo plazo y con muestras más grandes para confirmar completamente su seguridad y eficacia en diversas condiciones.
Efectos secundarios y precauciones
El ashwagandha es generalmente bien tolerado cuando se consume en dosis recomendadas. Sin embargo, algunos efectos secundarios pueden incluir:
- Malestar gastrointestinal. Como náuseas o diarrea, especialmente en dosis altas.
- Interacciones con medicamentos. Puede interactuar con medicamentos sedantes, inmunosupresores o para la tiroides.
- Embarazo y lactancia. Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben evitar el uso de ashwagandha sin la supervisión de un profesional médico.

Conclusión
El ashwagandha es una planta con propiedades prometedoras que se ha investigado por sus efectos sobre el estrés, la ansiedad, la función cognitiva, la regulación hormonal y la salud general.
Si bien muchos estudios sugieren que puede ser beneficioso para diversos aspectos de la salud, es esencial seguir investigando para confirmar sus efectos a largo plazo y sus interacciones con otros tratamientos.
Como con cualquier suplemento, es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de comenzar a tomar ashwagandha, especialmente si se tiene alguna condición médica preexistente o se están tomando medicamentos.
Este informe resume la información científica actual disponible sobre el ashwagandha y sus efectos en la salud, y ofrece una visión general de los estudios realizados hasta la fecha.